Los juegos de la era 8 bits se caracterizaban por ser muy simples pero, a su vez, extremadamente complicados, ya que precisamente en ello radicaba la larga duración de los mismos. WizardWizard los imita planteando unos intuitivos controles y unas fases verdaderamente difíciles.
Controlar al pixelado mago no te supondrá un reto, pero sí que sudarás la gota gorda al tratar de completar los niveles de este juegazo. La puerta de cada uno de ellos solamente se abre insertando en ella la llave que previamente debes haber recogido, tarea ardua teniendo en cuenta que para hacerte con dicho elemento tendrás que realizar saltos, esquivar ruedas con pinchos y lidiar con muchos otros obstáculos.
La dificultad va dada de la mano del nivel de adicción que aumenta conforme lo hacen las complicaciones. Tras completar WizardWizard tu autoestima habrá subido por las nubes y te verás capaz de todo.
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